Adriana Hernández – Junio 2015

 

La isla de Mallorca ofrece una multitud de oportunidades para el desarrollo de proyectos.

En este caso, el enunciado aboga por la generación de una Facultad de Artes en una isla de tanta belleza como la balear.

El entorno isleño ofrece una serie de limitaciones, que a su vez deben poderse solventar desde el ejercicio riguroso del análisis y la propuesta de arquitecturas que trasciendan el sentido de lo creado a un escalón superior.

Enlazando con el mundo del arte, la oportunidad de la ‘Nueva topografía’ generada permite trabajar en un concepto superior al establecido de topografia, apoyado en la creatividad artística.